La elección de Jorge Kalinger como secretario general de la Federación Latinoamericana de Trabajadores de la Educación y la Cultura (FLATEC) tuvo lugar en el XII Congreso Ordinario, que contó con la participación de más de cuarenta y cinco representantes sindicales. Con su designación, nuestro sindicato tendrá la responsabilidad de representar y defender los intereses de las y los trabajadores docentes de Latinoamérica y el Caribe.
Sadop, además, estará al frente de otras secretarías: la Secretaría General Adjunta para Suramérica, a cargo de nuestro secretario de Relaciones Internacionales, Bernardo Beltrán; la de Formación, encabezada por Mario Morant, uno de nuestros referentes sindicales; y la de Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo por la licenciada en Filosofía María Casalla.
Fundada en 1979, la FLATEC nació con el objetivo de luchar y dar respuesta a las problemáticas comunes de los países que la integran, tales como jubilaciones, salarios y condiciones de trabajo dignas.
En defensa de una educación para todas y todos
Durante la jornada, también se desarrolló un seminario de formación político-sindical en el que las y los presentes expusieron y denunciaron el contexto de ajuste y ataque permanente al sistema educativo por parte de los gobiernos neoliberales de la región. Allí, se reivindicaron los valores fundacionales de la federación: la lucha por la justicia social, por una educación pública y de calidad, por una democracia auténtica y representativa y el fortalecimiento de la identidad latinoamericana, especialmente a través de la cultura, la promoción de la cooperación y la integración de las/os trabajadoras/es de la región.
En este sentido, quienes participaron de este congreso analizaron el preocupante avance de las nuevas derechas en el mundo y remarcaron la necesidad de profundizar la resistencia de las trabajadoras y los trabajadores frente a la quita de derechos. Una especial declaración se refirió a las dificultades y las condiciones de precariedad laboral que atraviesan las y los docentes, auxiliares y estudiantes en Perú, el país anfitrión.
Asimismo, hubo una manifestación y compromiso conjunto para “sostener y redoblar la lucha en defensa de los derechos de las/os trabajadoras/os, especialmente en lo relativo a un salario justo y a dignas condiciones de trabajo”.