En una jornada que contó con la presencia de representantes de todo el país, el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) participó en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires como integrante del espacio RADAR, de la Intersindical de Cultura.
Durante el evento, además se contó con la posibilidad de recorrer la exposición de los poemas ilustrados recibidos en el marco de la convocatoria de Sadop en ocasión del pasado 8M, titulada “Mujeres que cambiaron la historia en sus territorios”. En el stand, que contó con la presencia de integrantes del Secretariado Nacional y de distintas Seccionales, también se realizó la presentación de libros publicados por docentes y delegadas y delegados de Sadop. La coordinación de los paneles estuvo a cargo de la secretaria de Cultura del sindicato a nivel nacional, Laura Chebeir,
Una forma de valorar el trabajo de las y los docentes
El primer panel estuvo integrado por Ana Mongelos (Formosa), que presentó Cruz de sal; Álvaro Román Rojas Díaz (Jujuy) habló de sus obras Relatos hechizados, Crímenes en carnaval y Del calendario escolar a la escena; Christian Malattia (Buenos Aires) trajo los libros Impulsos y En estas tierras; y Melisa Gentile (CABA) presentó la novela Leticia Rauch y los síntomas del amor.
Además de contar acerca del proceso de escritura de sus libros, así como de presentarlos ante quienes se acercaron al stand de la Intersindical de Cultura, hubo quienes se refirieron a su rol como docentes y los recursos empleados para despertar el interés por la lectura en las y los estudiantes.
Álvaro Román Rojas Díaz puso énfasis en el “impulso que desde el sindicato se ofrece a la actividad docente, no sólo desde lo sindical sino también desde lo artístico y lo cultural”. Melisa Gentile mencionó la importancia de que un sindicato docente participe de la FIL, ya que, entre otras cosas, “es una forma de valorar nuestro trabajo diario como docentes”.
Christian Malattia aprovechó el espacio brindado por Sadop para presentar sus dos libros de poemas y contar sobre su infancia, a la que consideró la fuente y la inspiración para la escritura de ambos. Melisa Gentile resumió el argumento de su novela juvenil y explicó que, si bien “despierta interrogantes y cuestionamientos que hemos tenido todas y todos”, se trata de asuntos que solemos dar por concluidos y, sin embargo, “siempre queda mucho por descubrir y mucho por conocer de nosotros mismos”.
trabajar con la memoria es una obligación más allá de lo personal: es una obligación como ciudadanos
Resistir
Del segundo panel participaron Florinda Díaz (Tucumán), con su obra Huellas del coraje; Daniela Wieder (Tucumán), quien presentó su libro en coautoría con Anita Jemio, titulado Fronterita cuenta su historia; María de la Paz Mari (Córdoba), autora de El poder de los mandalas y la naturaleza del color; y Bibiana Fulcheri (Córdoba), que expuso sobre su libro El Cordobazo de las mujeres.
Florinda Díaz describió el eje de su obra, centrado en la precariedad de las condiciones de las y los trabajadores de los ingenios azucareros hasta la llegada del peronismo. Luego, al vincular ese contexto con la actualidad, afirmó: “Si perdemos las referencias históricas, poco vamos a poder hacer para resistir todas las adversidades”.
Daniela Wieder agradeció la invitación de Sadop y compartió detalles sobre el momento histórico abordado en su libro: el Tucumán de los años 60 y 70, y los hechos ocurridos en el Ingenio La Fronterita, donde funcionó un centro clandestino de detención y se produjeron desapariciones forzadas durante la última dictadura cívico-militar.
Bibiana Fulcheri, cuya investigación recupera el rol de las mujeres durante el Cordobazo, relató cómo las y los docentes “se apropiaron del libro y lo convirtieron en una experiencia educativa”. Además, sostuvo que “trabajar con la memoria es una obligación más allá de lo personal: es una obligación como ciudadanos”.
Antes de cerrar el panel, María de la Paz Mari ofreció a las y los presentes una introducción al arte y el poder de los mandalas, proponiendo una guía simple para comenzar a dibujarlos, junto con distintos métodos de protección y resistencia frente a contextos hostiles.
Difundir cultura y poner el cuerpo
En el último panel, Darío Cortés (Buenos Aires) presentó Letra resiliente: textos sobre la diversidad y el bullying. Repasó su experiencia como estudiante, docente y escritor, y ahondó en el significado de la palabra resiliencia, a la que definió como “la capacidad del individuo de recuperarse y superarse frente a una experiencia adversa”. Y agradeció a Sadop por el espacio “para difundir la cultura y poner el cuerpo en este presente complejo”.
Luego, la secretaria de Cultura de Sadop La Plata, Silvina Melone, interpretó un monólogo que escribió para Teatro por la Identidad, ciclo que acompaña desde el arte a las Abuelas de Plaza de Mayo en la búsqueda de sus nietas y nietos secuestrados y desaparecidos por la última dictadura cívico militar.



Para el cierre, se celebró la “Sadopeña”, un encuentro musical y colectivo en el que participaron Sacha Trío, Adrián Birlis, Hernán Piker, Cecilia Navarro y Eduardo Barisone. Todas las actividades tuvieron lugar en el Stand Nº 3213, Pabellón Ocre, en el predio ferial La Rural (Av. del Libertador 4301, CABA).